sábado, 30 de noviembre de 2013

No había muerto... despertó

Y un día Juanjo despertó con las mismas ganas de morirse que hace diez años atrás. Y todo aquello que te dio nacimiento es lo que hoy te esta matando y despierta a aquel que nunca murió, aunque tu necesidad de apagar tanto dolor así lo haya deseado. No voy a cometer el mismo error y crear un tercer "yo" para acusar a quienes hoy disputan un cuerpo que no es de ninguno. ¿Que se siente reconocer que te fuiste del mundo para vaciarte y limpiarte y al volver no tardaste en embarrarte más de lo que estabas ...y en menos tiempo? Frustración ¿verdad? Deleita estos crueles oídos admitiendo que estas muriendo... el cambio de identidad, la construcción de esa gran mentira que fue dar a luz un ser mas fuerte, mas insensible, más inhumano... necesitaste cambiar de nombre y hoy estas disputando, sacando promedio, reviviendo a medias y matándote a la par para definir "que sos" al final, despertando eso que con un arrorró dormiste con todo el miedo que te acarrea encontrarte cara a cara frente al espejo con el reproche por los años que te privaste de vivir siendo el propio usurpador de ese trozo de vida ¿Donde quedó la esencia de aquel hombre que prometió jamas dañar a quien te ame? Diez años después haría bien en preguntarme que se siente volver a foja cero y recordar lo que viviste siendo vos sin ser vos. Y no habrá un tercero, aunque al fin éste sea justo y ya tenga en mente su seudónimo, pues no hay espacio para tres donde ya no caben dos. Y hoy no sabemos si matarnos o vivir las próximas décadas con espontaneidad reconociendo que un día compartimos el cuerpo con alguien más. Y eso que fui lo menos transparente que pude. Cuando me ubique en un sitio y recupere la palabra "yo" para referirme a mi mismo ¿Cual de los dos seré? Si alguna vez preguntaba cuantas maneras hay de morir, hoy la pregunta que se hace presente es: ¿Cuantas maneras existen de estar muerto?
Joan Evol.-
07/11/2013.

Yo no soy

Yo no soy lo que tus palabras acusan, soy lo que no puedo definir, y a cada instante dejo de ser. Voy diciendo todo lo que no soy porque no puedo decir el ser. Uno lo saca de uno del modo en que intente verlo, sentirlo u oírlo. Ignorante en que juzga, cuanto mas el que condena... no he de esperar otra cosa donde aprendemos y enseñamos a saber y no a ser. ¿Como acusarte así y como acusarme? Cuando todo lo que digo, lo que no soy, lo que es y lo que no se son lo mismo. Y somos uno y tocándote me toco y tocándome te toco. Sacate el egoísmo y recibí. Pregunto al que no sabe: ¿que es lo que hay dentro de mi? ¿quien creo la pertenencia? Yo no estoy ahí, hay poca mentira en esa frase... Eso esta ahí y no lo termino de ver. De que vale hablar en momentos en los que todas las palabras son toda una palabra, cuando todo es lo mismo, y pertenecer es por ti no ser... y tiene tanto sentido, no lo pienses, sentilo. Si cada cosa ocupa su lugar y cuando más separas los tiempos mas cosas ocupan un lugar exacto nada puede estar fuera de lugar. Una persona menos consciente se hubiera dado cuenta mas rápido. Compromisos con promesas donde parecer es parar de ser e incomodar es no tener como dar. Si todo es lo mismo ¿como agregar algo distinto? Y puedo ver en vos los limites que vos no ves por estar ocupado en ver los míos... y todo sigue siendo lo mismo, y hasta esperar es poner peros, sacale el mal para que no haya bien, tan egoísta como la nota mi, tan quieto como puedo moverme... y hasta yo puedo creerme lo que digo sin saber.
Y de a momentos me olvido de esto... aunque creería que son pocas las veces que lo recuerdo. Obstinado en la abstinencia... ¿No es lo mismo abstenerse a la abstinencia obstinadamente? y todo sin necesidad, y nada sin necesidad... algo sin necesidad, alguien sin necesidad. Idéntica identidad y no nos identifica. Y ahora entiendo el porque de tu abrazo tan ignorante si hablo de mí. y cuando todo es así dan ganas de compartirlo para sentirse entendido, comprender el un todo confiando en que también integras esto, que intento explicar discriminando las pocas palabras que aun tienen sentido.
Joan Evol.-
12/09/2013.

Nuestras lágrimas

Veo la emoción compartida fundirse, entre tus lagrimas y las mías. No nos vamos a poner a discutir habiendo cosas mas importantes por las que llorar. Como evitar confundir capricho con anarquía cuando todo se mueve bajo mis pies? Y es el mar que se lleva el agua de nuestros ojos, ese mar que nos rodea, y se disfraza de río porque quiere nomas, porque así se resiste a ser surfeado... atrevido el animado que escurre las lagrimas, obsequios del alma a los vientos. Y no es la primera vez que un poema se me va al carajo... y me mira desde arriba y dice: "tierra Juanjo, tierra... es hora de fabricar nuevos recuerdos para la gente vieja". Y así voy buscando dentro de mí y aun no se que es lo que busco... y es poco lo que escucho, leo y sigo a los maestros, no vaya a ser que la sugestión me haga creer que estoy llegando donde creo que no se llega y que descubriré cuando genuinamente resuelva no esperar ¿como esperar aquello que no se? Y la vida y el mundo pareciera estar hecho todo para vos, para que vos vivas, para que vos experimentes, para que vos transites... y sos especial como todos en el mundo, sin que por ello nadie pierda la cualidad de tal. Solo que esta vez y otras tantas veces no apreciamos la verdad. Y no se bien que paso, yo quería seguir escribiendo sobre tus lagrimas y las mías.
Joan Evol.-
16/10/2013.

De Juanjo para Joan

Llorando picardías a dos del final, detectando lo que molesta para desechar, destruir, eliminar. ¿Estrategias para que si no hay nada que planear? Si no funcionó hace veinte años ¿Que me hace pensar que hoy día funcionará? Y en esta vida variante, bromista y traicionera he tomado muy en serio todas vuestras advertencias. Lo que antes era muy nuevo para este sitio y momento hoy sera clásico, viejo, en desuetudo. Y aquel punto exacto, donde vuelan los sabores, se halló justo ahí, donde el clavo traspasó tu corazón de madera, y cuando comenzó a oxidarse se adhería con mas fuerza confundiendo las materias. No hace falta estar drogado para decirse lo que se piensa, fueron muchas las lágrimas vedadas a pedido o por ordenes de quien o quienes las provocó o generaron... y tuviste que dejar de ser madera para que el clavo saliera. Historia: horrible palabra cuando uno aspira a vaciarse... más aun cuando te van a juzgar... y ese olor a ensayo se hace presente con el sol de octubre derritiendo tu frente. Son esas horas en las que no tenés con quien hablar las que te hacen escribir esas cachetadas que jamás le diste a tu mundo. Y necesitaste dos nombres, dos apellidos, dos personas porque al ego no le alcanza con un solo recipiente. Brindo por el tercero que festeja todas esas veces que no te olvidaste ser uno de tanto y tanto ser dos. Si que cuesta, y parece que es "a uno" al que le cuesta un poco mas que a los demás, si no te rompiste el puño de tanto golpearlo contra la pared puede que un día al fin la rajes y de tanto perseverar termines traspasando el muro. Y hoy te hiere este clavo, un clavo mas grande, un clavo que vos creaste y clavaste... y te resistís a sacarlo, solo para que dure mas ¿Para que dure más el dolor? Pero es tu clavo y es tu cruz la que cargas con elegancia, disimulando el cansancio de cargar con su peso. "No es fácil ser yo" oíste clamar mas de una vez a desesperados, mas no repetirás la frase por mas que lo estés pensando. Ahora que no le temes a lo que no ves... ahora que no tenés miedo de perder te resulta mas fácil renunciar y me parece apropiado todas las veces que comprendí que es innecesario incrementar el sufrimiento. Y es la voz de la conciencia ¿Que estoy diciendo? -si te oyera don Siddhartha- ¿La conciencia tiene voz? ...es la voz de la razón, una razón egocéntrica y soberbia la que dicta estos renglones, proyectando en el espejo, tanto de cerca cuanto de lejos, ira y autocompasión. Y mientras el viento empuja hacia el suelo las gotas de lluvia me ciento a observar como emerge el fango del subconsciente... y sale a flote el diálogo mental, las asociaciones de ideas, reacciones emocionales e interpretaciones egocéntricas. Y hoy no puedo afirmar con certeza si recordé algo vivido o si solo han sido sueños.
Joan Evol.-
23/10/2013.

Cinco minutos antes de que termine el día.

No tiene precio cuando llega ese momento en que encontrás poemas en las cosas que hacés cotidianamente en un mundo donde se puede decir cosas distintas usando las mismas palabras. Cuantas maneras de salir a flote los valores de una generación, aunque a otros poco le valga. Cuando lo abstracto te limita, no hay nada mas burdo que esforzarse en decir cosas sublimes. Nos vamos... prometiendo cosas que no pondremos en práctica. Y aunque parezca un disco repetido sigo creyendo que lo más de lo más es lo menos de lo menos, sin más mentiras que la de percibirse como alguien, como algo... como nada. Ya me olvidaba en el bolsillo los puntos suspensivos y se me quedaban los plurales en el camino de tanto ser singular, arrastrando un egoísmo que no te acompañará pues se hará segunda persona cuando te hayan de juzgar. No te imagines para que suceda o matalo con la imaginación, deseá no desear y solo tendrás un deseo más. Y tan mal ando escribiendo que hasta suelo ponderarme y justo en la brecha final se escabulle la frase que tanto te atragantaba para al fin no regresar aunque deje su secuela en la próxima oración. Y hasta es grato observar como alguien más pretende comprender lo que ni el autor consigue descifrar. Decime que estoy despierto... cinco minutos antes de que termine el día.
Joan Evol.-
20/11/2013. 

Besos de madera

Me pregunto cuantos saben más del cincuenta por ciento de lo que dicen, toda vez que la reacción es más lenta que la intención. ¿Quien dijo que el fuego es rojo? también es amarillo, anaranjado, verde, azul y negro. Aunque todo vaya más lento no depende nomas de que aceleres, pues puede que así algunas cosas se muevan más rápido, sobre todo las que se acercan ¿Y que hay de los impactos? ¿Y que hay de las sorpresas? los primeros duelen más y las segundas tienen mayores probabilidades de acaecer. Hoy verlo en slow motion alerta de las consecuencias que acarrean las imprudencias. 
Y voy a ningún lado diciendo todas esas cosas que no haría, pues solo son pensamientos, tal vez tentaciones. Besos de madera. No merezco nada, no ofrezco nada... no te asustes, no es otra cosa que un menos por menos igual a mas. Hoy no puedo decir que quiero estar muerto pues caí en la cuenta que mientras este vivo no sabre lo que es morir, no podría estar seguro de arriesgarme a desear algo que no conozco y no se como funciona, ergo he de aceptar, cuando suceda no quedara otra que acatar. La experiencia de los demás que angaú volvieron de la muerte... ¡Al carajo los dichos de mi vieja, de Sueiro y mi tía con catalepsia! Si dormir es lo mas cercano a estar muerto es algo que en lo personal no puedo afirmar, solo se que prefiero dormir porque conozco el sueño y se que me ayuda a descansar y hasta me ahorra episodios que no necesito ni deseo vivenciar, presenciar, someterme o atestiguar... Sobre todo las veces que entendí que una depresión no es tener la presión baja ni es estar bajo presión. Hoy derrito en este desierto deseos de polietileno y el Paraná sumerge a la vez que arrastra sueños de terciopelo. Y es que cansado de estar cansado descanse del descanso y dormí tan solo un sueño para despertar de estar despierto y estos son los momentos en los que no comprendo si estoy en vigilia escribiendo esto o si lo que viene a mi memoria son recuerdos o sueños. Y no puedo saber quien soy si me confundo entre lo que viví, lo que soñé y lo que inventé. Y al no saber siquiera si estoy triste me refugio en el presente que es lo único real pese la distorsión interpretativa que la mente pueda crear. Y hay que bancarse un subconsciente que empieza a sacar a flote todo aquello que te embarró sin darse uno cuenta. Hay veces que deseo haber tenido una vida mas vacía, con menos episodios, con menos sofisticaciones, con menos preferencias. Expectativa que deviene en ansiedad cada vez que el objeto del deseo demora en llegar o cuando esperamos por algo que quizás nunca sucederá. Hoy pensaba en el éxito y en el fracaso y lo diferente que puede ser serlo y sentirse. Si los egos me permiten tal vez algún día encuentre ese equilibrio que ya no espero pues esperando me desconcentro y eso me descentra y tal vez me incline. Y yo no se si es positivo o negativo y a decir verdad tampoco se si me importa o no me importa, mas no pido auxilio pues si bien no estoy flotando tampoco me estoy hundiendo.
Joan Evol.-
19/11/2013.

viernes, 22 de noviembre de 2013

Veinte años después

Joan Evol.-
Hay que ver si sucedió o si te lo volviste a inventar y te lo volviste a creer. ¿Será que tendrás ganas de usar automáticamente las mismas palabras veinte años después? ¿Como sabemos que todo es como creemos?
Eso estuvo cerca... no te enloquezcas amigo, maneja con arte los tiempos, vos sos bueno para eso. Y a pesar de que la vida se encargó de pillarnos una lágrima cada vez que no hizo falta estarás ahí sorprendiéndote de estar cuando los hijos de los hijos se vayan. Y ese piano te regala melodías de algún alma, y lo escucho aún, tan suave, como hace años no sonaba. Yo recuerdo que eras feliz, cantabas... desafinabas.
Yo recuerdo algunos lugares que no volví a pisar y ya no se si existen ¿viste que todo cambia? También recuerdo haber vuelto a lugares que creí que había soñado y al atar algunos cabos me enteré que ahí había estado.
¿Donde quedaron todos mis juguetes? Si tras el golpe no crecí tan rápido ¿En que momento deje de jugar para echarme en un rincón con la guitarra en el regazo, sobrio, las veces que no pude solventar otros estados, y disfrazando de moral y niño limpio para no cargar sobre mis hombros el opúsculo sollozo de tu fracaso... pluma en mano? Irresponsable, vago, solapado... poniendo en pausa alegrías y tristezas, viendo la vida tras cristales empañados.
Veinte años después recuerdo que así terminaba el siglo. Y aun suelo ver el humo escurrirse entre sus labios.
22/11/2013.