lunes, 23 de febrero de 2015

Hay cosas que cuestan decir

Y yo no se lo que ella esperaba,  
solo di lo que tenía para ella,  
o tal vez no,  
tal vez solo di lo que me dejé soltar.  
El resto,  
egoísta,  
lo guardé solo para mi...  
y hoy rebosa en detrimento  
el efecto mezquindad.  
Y ella reaparece  
cuando realmente ya no quiero más.  
Y me alegra pero asusta,  
porque hiere queriendo curar.  
Y el gran desafío  
es decirle que no  
estando soltero.  
¿Que puedo yo hacer?  
No sé lo que ella quiere.  
No hay mejor meditación  
que ser sincero con uno mismo. 
Joan.-
23/02/2015.

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